Cuando todo el mundo pensaba que ya no se podía caer más bajo, que las amenazas proferidas por Pedro Antonio Ruiz Santos eran suficientes, hoy nos encontramos con un nuevo episodio de una mente descontrolada por el odio que profiere "cariñosas" palabras a mi persona.
Hoy ha sido Gabriel Nieves, funcionario y ex-concejal del PSOE al que le suben 6.000€ en el catálogo del Alcalde, el que me ha insultado, el que se ha olvidado de la definición que da el Código Civil de difamación, injurias y calumnias. Según él, todo lo que dice este "niñato" (palabras literales de ese señor) es mentira. Bien, repito lo mismo que he dicho siempre: me remito a un acuerdo plenario. Si es falso, que pregunte en su casa, que ahí encontrará a quien firma ese informe.
Por lo demás, no merece la pena contestar a personas que, en algunos momentos, se dejan guiar más por el odio y el rencor que por el sentido común. Villarrobledo ya nos conoce. Que sigan utilizando la emisora municipal, la que pagamos con los impuestos de todos, para tratar de provocarme y difamarme, aunque, por mucho empeño que pongan, no lo conseguirán.
jueves, 8 de octubre de 2009
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